Chimalhuacán, Méx., 3 de nmayo 2016.-Las acusaciones falsas con el propósito de causar daño son propias de gente que generalmente no tiene razón, que no tiene argumentos para poder sacar adelante sus posiciones y que trata de victimizarse para que hacer avanzar su postura, aunque sea perversa, en contra de quienes dicen defender y de quien no pertenece a su grupo político.
Así es como se conducen los “líderes” del “plantón” que desde hace once días se encuentra a las afueras del Palacio Municipal de Chimalhuacán, Estado de México, quienes con descalificaciones y lenguaje soez incitan a la violencia en contra de la alcaldesa Rosalba Pineda Ramírez y de todos los funcionarios públicos que ahí laboran de lunes a sábado.
Es cierto, como dicen, que la presidenta municipal constitucional de Chimalhuacán se niega a dar respuesta a sus peticiones, pero porque esos “líderes”, regidores y ex regidores prácticamente sólo exigen plazas para “aviadores” con sueldos de 20 mil pesos mensuales, viáticos para realizar su trabajo partidario y vehículos para su uso personal. Públicamente lo ha admitido la presidenta municipal Rosalba Pineda Ramírez: no permitirá que los recursos de los chimalhuacanos se vayan a los bolsillos de gente que no trabaja y no aporta al progreso de Chimalhuacán.
Tan no enarbolan demandas sociales, que esa misma gente que se queja tan amargamente en un escrito calumnioso publicado en el diario digital “Reporteros en Movimiento“, NO ACUDIÓ a la cita que la alcaldesa les agendó para el pasado lunes 2 de mayo a las 17:00 hrs. porque, dijeron, “no se pusieron de acuerdo en qué demandas solicitarían”. Es decir, no saben cuáles son las carencias de los chimalhuacanos a los que dicen representar pero que no se ven por ninguna parte. Además, ellos mismos reconocen que la alcaldesa los recibió el pasado miércoles 27 de abril y que les dedicó dos horas. Creemos que fue suficiente tiempo como para que la alcaldesa se negara a darles privilegios y concesiones a los que se dicen de “izquierda”.
Las bases de las que hablan los integrantes de MOCyP, Movidig, Conciencia Ciudadana, Ucide, Movimiento Nueva Gestión, y demás membretes, deberían verse en el plantón perredista que dice buscar que la alcaldesa solucione problemas de la gente. Sin ánimo de ofender, por ningún lado se ven las personas volanteando o gritando consignas o, simplemente, esperando afuera de las carpas a que los atienda la presidenta municipal, quien diariamente pasa por ahí para entrar o salir del Palacio y quien tampoco se burla de alguien porque ahí no hay nadie.
A pesar de ello, el Ayuntamiento ha sido respetuoso de la libre manifestación y ese plantón no ha sido tocado para nada; mentira que se les haya cortado la luz, basta con darse una vuelta por el jardín municipal para que los oídos sufran los embates del sonido que utilizan para denostar a una luchadora social que en 16 años ha hecho mucho por el progreso de Chimalhuacán.
En lo que respecta a los mototaxistas de la Fundación Estrella, los vecinos solicitaron a la presidencia municipal que no se les diera permiso de establecer bases ni en la cabecera municipal ni en Los Olivos porque es gente majadera que acosa a los usuarios y es un grupo que tienen denuncias por agresiones y robo a los transeúntes.
El plantón de las organizaciones de la llamada izquierda ha traído varias consecuencias: los chimalhuacanos fueron despojados de su jardín municipal porque está invadido por lonas, pancartas y un ruido ensordecedor con grabaciones en contra de la presidenta municipal que incitan al odio y la violencia. Nos preguntamos, ¿por qué no hay nadie para defender sus posiciones y dispuesto a entablar negociaciones con los funcionarios? Porque no hay nadie; ese plantón sólo es de lonas, sonido y pancartas para afectar la imagen de la presidencia municipal de Chimalhuacán, pues no les importa nada más, porque lo único que quieren es sacar dinero público.
De cualquier forma, reiteramos la disposición del Ayuntamiento de Chimalhuacán a atender las demandas de la gente, siempre y cuando sean demandas colectivas y no para satisfacción personal como hasta ahora se ha visto.
