Ecatepec, Méx., Irma Rosa no le importò
estar por mas de 30 horas expuesta a las inclemencias del tiempo, primero frios
de cero grados y despues calor de 27 grados, para poder escuchar y ver al Papa
Francisco.
Ella como cientos de personas, un millòn
200 en las vallas y 320 mil en la misa-. acudieron al predio el Caracol en el
municipio de Ecatepec, para pedirle a Dios por un milagro y porque no al Santo
Pontifice.
Ella al igual que Juanito, quien tiene un
tumor en la cabeza, sabian que no habrìa sillas en donde sentarse, pero
ataviadas con una cobija y una chamafra decidieron hacer frente al frio que ya
se habia alertado podrìa disminiuir a los cero grados centigrados.
Sentados en el suelo, algunos màs acostados
sobre gravilla, mas de 300 mil personas pasaron
a la intemperie la noche, pues el predio descampado, pues solo de frente
se tenia el presbiterio donde oficiaría la misa Jorge Mario Berglogio.
Aunque fueron largas horas de espera los
canticos a la virgen Guadalupe, cuya imagen se encontraba en el altar, los
mantenia contentos y con fé segun comentò Dona Ana de 70 años de edad, quien
afirmò que querìa ir a la zona para conocer el Papa, tal vez el ultimo sumo
pontifice que pudiera ver.
En las
calles la situaciòn era simular, más 25 mil voluntarios se dieron cita a
lo largo de los 8.8 kilometros de camino que recorrerìa el Papa Francisco. Ello
para calentarse bailaron y ensayaron las canciones que afirmaban le cantarian a
su paso, pero muchos de ellos al paso de Su Santidad la olvidaron por la
emociòn de ver pasar a su santidad.
Conforme fue amaneciendo tanto en el predio
como en las vallas, las porras de Francisco hermano ya eres Mexicano, “Corazòn
Grande, corazòn chico, bienvenido Papa Francisco” empezaron a calentarse para
dar bienvenida al sumo pontifice.
Aunque por horas practicaron la ola, una
vez que vieron a su santidad, la algarabia de que arribò al filo de las 11.30
horas, hiz o que se olvidara y solo trataran de acercarse y poder tomarle una
fotografia.
El momento mas emotivo fue cuando su
santidad dijo la homilia, en donde afirmò que es tiempo de reflexionar y acabar
con una sociedad que es de unos pocos y para unos pocos, por lo que afirmó que
es tiempo de reflexionar
Ello detonó el llanto de miles de
feligreses, entre ellos Irma Rosa, quien afirma que el tan solo escuchar al
Santo Padre aliviò su alma, pues tenia miedo de morir a causa del càncer.
Al concluir la misa, miles de personas
seguian esperando en las vallas el paso del Papa quien tomaria un descanso
antes de partir a la ciudad de Mèxico