Distrito Federal, 24 de junio 2013.-El Procurador Federal
del Consumidor, Alfredo Castillo Cervantes, expresó que como institución se
busca “un punto neurálgico que es vincular a la sociedad con el gobierno,
formar un binomio indisoluble entre Estado y sociedad”.
Al inicio del programa de capacitación “Amas de Casa Vigilantes”, afirmó que ellas serán los ojos de una institución, pero también los ojos y los oídos de millones de mujeres que necesitan su información para comprar mejor, más barato y ser consumidores responsables para tener un consumo sostenido.
En este primer programa piloto de varios en los que ya trabaja Profeco, 500 personas aportan un trabajo social, ciudadanizado, desinteresado, donde se persigue el interés genuino de la gente.
Dijo que queremos que la Profeco sea el punto de referencia para muchos otros programas y que otras instituciones volteen a ver la importancia que tiene “el acercarse a la gente y que la gente crea en las instituciones”.
Ante las asistentes, advirtió la presencia de una Profeco renovada, “que no le tiene miedo al cambio, que se quiere modernizar, que se quiere adaptar, que quiere tomar las prácticas internacionales que reportan un mayor beneficio a la población”.
Castillo Cervantes resaltó la importancia de romper la inercia de la burocracia: “cuando hablo de la inercia de la burocracia es que tenemos que buscar los canales y los mecanismos para acercar las instituciones a la gente”.
El programa “Amas de casa Vigilantes” agrupa 500 mujeres en todo el país y persigue un doble propósito: atender la instrucción del Presidente de la República de tener un gobierno cerca de la gente, que trabaje para la gente y que nos apoyemos en la gente, así como generar una gran cantidad de información que sirva a toda la población, a millones de personas en todos los rincones del país el país.
Comentó que su participación “nos hace diferentes y nos hace mejores solo por el simple hecho de contar con ustedes y tener su voto de confianza, confianza que no les vamos a defraudar”.
Llamó a las presentes para que a partir de hoy, las amas de casa, las mujeres y la Profeco, trabajemos de la mano y que esto sea sólo el inicio de una larga experiencia de actividades que podemos desarrollar de manera conjunta.
Al inicio del programa de capacitación “Amas de Casa Vigilantes”, afirmó que ellas serán los ojos de una institución, pero también los ojos y los oídos de millones de mujeres que necesitan su información para comprar mejor, más barato y ser consumidores responsables para tener un consumo sostenido.
En este primer programa piloto de varios en los que ya trabaja Profeco, 500 personas aportan un trabajo social, ciudadanizado, desinteresado, donde se persigue el interés genuino de la gente.
Dijo que queremos que la Profeco sea el punto de referencia para muchos otros programas y que otras instituciones volteen a ver la importancia que tiene “el acercarse a la gente y que la gente crea en las instituciones”.
Ante las asistentes, advirtió la presencia de una Profeco renovada, “que no le tiene miedo al cambio, que se quiere modernizar, que se quiere adaptar, que quiere tomar las prácticas internacionales que reportan un mayor beneficio a la población”.
Castillo Cervantes resaltó la importancia de romper la inercia de la burocracia: “cuando hablo de la inercia de la burocracia es que tenemos que buscar los canales y los mecanismos para acercar las instituciones a la gente”.
El programa “Amas de casa Vigilantes” agrupa 500 mujeres en todo el país y persigue un doble propósito: atender la instrucción del Presidente de la República de tener un gobierno cerca de la gente, que trabaje para la gente y que nos apoyemos en la gente, así como generar una gran cantidad de información que sirva a toda la población, a millones de personas en todos los rincones del país el país.
Comentó que su participación “nos hace diferentes y nos hace mejores solo por el simple hecho de contar con ustedes y tener su voto de confianza, confianza que no les vamos a defraudar”.
Llamó a las presentes para que a partir de hoy, las amas de casa, las mujeres y la Profeco, trabajemos de la mano y que esto sea sólo el inicio de una larga experiencia de actividades que podemos desarrollar de manera conjunta.
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