Ecatepec, Méx., 11 de diciembre 2016.-El regreso de las fuerzas armadas a los cuarteles debe ser de manera gradual y su presencia debería ser solo en estados y zonas donde el crimen organizado ha corrompido o rebasado a las policías estatales y municipales y sólo para enfocarse en contener el flujo de armas y drogas, consideró la Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM).
Francisco Cuevas Dobarganes, Director General de la agrupación coincidió en la postura del Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, respecto a que la función de las fuerzas armadas es la de velar por la seguridad del país y no la de hacer funciones de policías tratando de contener los actos delictivos.
“Pensamos que en su momento fue una decisión entendible por parte del Poder Ejecutivo, ya que los índices delictivos se incrementaron de manera muy dramática, sin embargo debió de ser una medida temporal y sólo focalizada a los estados y zonas donde el crimen organizado había corrompido o rebasado y de manera clara a las corporaciones policiacas de los tres órdenes de gobierno”, apuntó el líder empresarial.
La UNIÓN manifestó que en muchos estados los gobernadores evadieron la responsabilidad y endosaron el problema al ejército y después a la marina, mientras las policías locales dejaron de lado su encomienda y en algunos casos, afortunadamente pocos, incluso operaban para la delincuencia.
“Es cierto que en los estados donde los marinos y ejército les encargaron funciones de seguridad, las policías locales relajaron su accionar y en casos aislados, hasta han servido a los cárteles de la droga como halcones, dando aviso de los recorridos y retenes que hacen los soldados”, señaló Cuevas Dobarganes.
Para UNIDEM no es conveniente tener a marinos y soldados en funciones de seguridad, sin embargo considera que ahora es el momento menos oportuno para regresarlos a sus cuarteles.
Hay municipios en los que se justifica plenamente su presencia, pero es indispensable regular su accionar por medio de la Ley de Seguridad, y no sólo lanzarlos a las calles sin estrategia, sino que orientar su participación sólo a contener el flujo de armas y droga y a encapsular las plazas que tienen más problemas, dejando que las policías hagan su trabajo y evitar que los criminales se muevan.
Opinó que en las zonas metropolitanas los retenes y patrullajes de los marinos y ejército tienen un resultado contraproducente, ya que sólo tienen una función inhibidora y crean un ambiente enrarecido que es muy perjudicial, sobre todo para el turismo.
El director general de UNIDEM apuntó que en el caso de los municipios de la Zona Conurbada de la Ciudad de México donde se han reducido los índices de criminalidad, responde más a la depuración de las corporaciones policiacas, a su capacitación y a la implementación de nuevas tecnologías en el combate al crimen como los C5, más que a la participación de los soldados y marinos.
“Pensamos que los soldados sí deben regresar a sus funciones de manera gradual y con sentido, debe ser adelgazada su estructura y esos recursos deberían ser utilizados para depurar, capacitar y mejorar las condiciones de los policías; asimismo, adquirir tecnología y mejorar las estrategias de combate a la inseguridad”, reiteró Francisco Cuevas.
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