Chimalhuacán, Mèx., 28 de junio 2013.- En el marco del Día Mundial del Árbol, el gobierno del Nuevo Chimalhuacán continúa con la campaña municipal Adopta un árbol que forma parte de la tercera etapa del programa de Imagen Urbana, cuyo objetivo es embellecer el municipio.
A través de la campaña municipal, más de 11 mil 700 árboles encontraron una familia que los cuidará y hará crecer grandes y fuertes con lo cual contribuirán con las acciones del cuidado del medio ambiente, informó la supervisora del programa Imagen Urbana, María de los Ángeles Hernández.
La también ingeniera agrónoma egresada de la Universidad Autónoma Chapingo indicó que hasta el momento se ha entregado el 78 por ciento del total de los árboles, toda vez que se pusieron en adopción más de 15 mil: “la campaña ha sido todo un éxito, pues favorece el entorno de los habitantes, ofrece un mejor lugar para vivir y nos ayuda a promover la participación ciudadana en el cuidado del medio ambiente; además, podemos festejar el día del árbol con verdaderas acciones”, comentó.
Cabe destacar que en 1959 en México y por decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, se adoptó esa celebración, con el propósito de concientizar a la población mexicana en el cuidado de los árboles y la reforestación a fin de beneficiar a las generaciones presentes y futuras.
Los bosques ayudan a la formación y protección del suelo, además de ser el hábitat de fauna silvestre y, manejados técnicamente, representan una importante fuente de beneficios económicos para sus dueños y poseedores.
Ángeles Hernández agregó que al adoptar un árbol, cada persona recibe un certificado, información sobre la especie del árbol, y todos los datos necesarios para asegurar que el árbol crezca correctamente y sobreviva. “Así, con las herramientas necesarias, el paquete de adopción se completa con muchas ganas de cuidar al árbol, de hacer todo lo necesario para que crezca y aporte oxígeno”, manifestó.
Se estima que en el estado de México aún existen 137 mil hectáreas de bosques perturbadas, por lo que se requiere su reforestación ya que son los que producen la mayor parte del agua para satisfacer el consumo humano, la agricultura y la industria, tanto del estado mexiquense como de la Ciudad de México y de ciudades vecinas que conforman las cuencas del Lerma, Balsas y Pánuco.
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