Lerma, Mèx., 19 de mayo 2015.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) realizó una visita de supervisión al Proyecto Inmobiliario “Reserva Santa Fe”, a fin de constatar que el desarrollo, cuya superficie es de 200 hectáreas de terreno mayormente boscosas, no cuenta con permisos para cambio de uso de suelo que emite la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Asimismo, verificó la actual zona de afectación en que ha incurrido dicho desarrollo que contempla la construcción de 500 exclusivas viviendas y 4 lagos, así como Casa Club, puentes colgantes, tirolesa, vivero y granja ecológica, en el predio denominado Santa María Atarasquillo, municipio de Lerma, Estado de México.
Durante el recorrido encabezado por el Procurador Guillermo Haro Bélchez se constató que las obras están suspendidas desde el pasado mes de abril, las cuales consisten en la edificación ilegal de 4 terrazas para cabañas, un campo de futbol, un almacén de materiales, una cisterna, así como una ampliación de camino con cunetas de cemento.
También se realizaron alcantarillas y taludes cubiertos de biomanta de fibra de coco, así como un recubrimiento de camino con páneles de polipropileno; toda la construcción se llevó a cabo sin permiso de la autoridad federal ambiental correspondiente.
Cabe señalar que si bien la empresa responsable del citado proyecto inmobiliario cuenta en la actualidad con un Programa de Manejo Forestal, este documento no autoriza en ningún momento llevar a cabo obras en la zona forestal del predio Santa María Atarasquillo, en el Estado de México.
La PROFEPA indicó además que de acuerdo a la Carta de Uso de Suelo INEGI-Serie IV (2010), el tipo de vegetación de ese predio donde se pretenden edificar casas en 90 hectáreas de terreno está compuesto por 51% de Bosque de Oyamel, 37% de pastizales inducidos y 12 % agrícola.
De igual forma, abunda esta dependencia, el Ordenamiento Ecológico del Estado señala que dicho predio está registrado como Unidad de Gestión Ambiental (UGA) An-5-183, con uso predominante de Área Natural Protegida (ANP), con Fragilidad Ambiental Máxima y sujeto a una Política Ambiental de Protegido.
El Procurador Federal de Protección al Ambiente verificó además la afectación forestal causada por la implementación de caminos temporales que fueron realizados con maquinaria pesada, para la colocación de material de construcción, cuyas acciones alteran la composición natural del ecosistema.
Por lo anterior, esta dependencia federal precisa que se requiere también de una autorización específica para cambio de uso de suelo en terrenos forestales, la cual otorga SEMARNAT mediante un estudio técnico justificativo y una autorización de impacto ambiental, que no han sido exhibidos.
Las edificaciones hechas en el predio reflejan la intención de establecer un desarrollo inmobiliario dentro del bosque, lo que desequilibraría el ecosistema causando fuertes impactos a la filtración y escurrimiento de agua, en una zona considerada como de recarga del vital líquido que abastece al Valle de Toluca y poblados cercanos.
En el recorrido estuvieron presentes el titular de la PROFEPA; Miguel Ángel Contreras Nieto, Secretario de Medio Ambiente, del Gobierno de Estado de México; Ana Margarita Romo, Delegada de la PROFEPA en el Edomex y el Ing. Raúl Galindo Quiñónez, Director General de PROBOSQUE.
Asimismo, Ignacio Millán Tovar, Encargado de despacho de la Subprocuraduría de Recursos Naturales de la PROFEPA; así como Armando Turrent Riquelme y Jose Carredano, representantes del Proyecto “Reserva Santa Fe”.
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