Chimalhuacán, Méx., 16 de junio 2016.-“Es digno de reconocer que un gobierno invierta en la historia de su municipio, lo cual se traduce en la conservación y promoción de la identidad de los habitantes. También se debe reconocer el esfuerzo que hace la alcaldesa Rosalba Pineda Ramírez y los presidentes municipales anteriores que han destinado recursos para los proyectos de restauración y modernización”, comentó el delegado del Estado de México del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Ricardo Arturo Jaramillo Luque.
Durante un recorrido con los titulares de Turismo y Desarrollo Urbano municipal, Julio Alejandro Pabello Alonso y Valeria Domínguez Roldán, respectivamente, el delegado del INAH planteó la factibilidad de iniciar nuevos proyectos de restauración en la Cabecera Municipal de Chimalhuacán y supervisó los trabajos que actualmente se realizan en el casco del Rancho El Molino.
“Es satisfactorio ver que el gobierno municipal está realizando los trabajos de restauración y remodelación de los muros, techos y pisos de la hacienda El Molino con base en los lineamientos que les planteó el INAH”.
Agregó que uno de los espacios restaurados será habilitado como museo “con un nuevo rostro, la hacienda El Molino dará la bienvenida a la población que quiera adentrarse al mundo de la historia de Chimalhuacán, podrán conocer y convivir con sus raíces”.
Al respecto, Pabello Alonso informó que el museo llevará por nombre Historia y vida de Chimalhuacán, en el que los visitantes podrán admirar el cráneo del Hombre de Chimalhuacán, los restos de la defensa de un mamut y vestigios arqueológicos con más de 10 mil 500 años de antigüedad.
Las autoridades visitaron también la Parroquia Santo Domingo de Guzmán donde funcionaba un exconvento, estructura que data del siglo XIX y que proyectan restaurar “el edificio está bastante deteriorado, producto de los temblores ocurridos a lo largo del tiempo, es necesario trabajar en este espacio para conservarlo y evitar que se convierta en un riesgo para los visitantes”.
Asimismo, el delegado del INAH y las autoridades municipales recorrieron la Plaza de la identidad chimalhuacana y la zona arqueológica Los Pochotes “estas áreas están muy bonitas, limpias y cuidadas, es sorprendente como los gobiernos municipales transformaron los espacios y mantuvieron la esencia, las raíces de este pueblo que antes era reconocido por la pobreza y marginación; pero que ahora luce diferente”.
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