Ecatepec,
Méx., 15 de enero 2017-Los exhortos en redes sociales a no comprar productos en franquicias
americanas acabaran con fuentes de empleo de mexicanos y de quien adquiriò la
franquicia, alertó el presidente de la Unión Industrial del Estado de México
(UNIDEM), Francisco Cuevas Dobarganes
“Por
un momento olvidamos que las empresas comerciales o los productos
norteamericanos, se trata de franquicias que pertenecen a socios
mexicanos, donde trabajan mexicanos en empleos formales, que pagan
extraordinarios sueldos y con todas las prestaciones de ley, y además, pagan
grandes cantidades al fisco”, destacó
La UNIDEM, que agrupa a las
empresas más grandes del Estado de México, muchas de ellas de capital
extranjero y algunas de inversión norteamericana, lamentó que las políticas
públicas y los comportamientos de la sociedad, tiendan a desunir y fracturar
los puentes que unen a las razas y las naciones.
“Los
videos y gráficos en donde se invita a los mexicanos a través de las redes
sociales a no comprar productos o en tiendas de origen estadounidense, sólo
contribuyen a destruir elementos económicos que a nosotros mismos nos
benefician”, apuntó.
“Empresas
como la Coca Cola, o agencias de la Ford, GMC o Chrysler, pertenecen a
mexicanos, ahí trabajan mexicanos, sus plantas de producción siguen estando
mayoritariamente en México y con extraordinarios beneficios para todos
nosotros. El alimentar ese sentimiento antinorteamericano, no conducirá a nada
positivo”, alertó el dirigente empresarial.
Ante
ello, dijo que para contrarrestar los efectos negativos ante la pérdida de
inversiones estadounidenses por la política económica de Donald Trump, es
necesario mirar hacia el consumo interno, fomentar la inversión, la
desregulación y la transparencia, así como encontrar equilibrios presupuestales
tanto de gobierno en sus tres niveles, así como en empresas y familias,.
Lo
anterior, luego de la cancelación de la construcción de la planta de Ford en
San Luis Potosí, que implicará dejar de crear 2 mil 800 empleos directos en la
planta, más los empleos que se darían durante el proceso de construcción e
instalación más los de empresas que venderían insumos a esa empresa.
Cuevas Dobarganes lamentó que se esté
presionando a empresas de otros giros y países a no invertir en México y sí a
hacerlo en Estados Unidos. “Pensamos que el Señor Trump no debería de fomentar
los desequilibrios sociales, políticos y económicos entre los países, pues esas
han sido las causas de las grandes migraciones, conflictos bélicos y
recientemente actos terroristas de la historia de la humanidad, por ese tipo de
situaciones a nadie convienen”.
“Aplaudimos
la decisión de las empresas que han subestimado los comentarios del próximo
presidente de los Estados Unidos y continúan con los planes de inversión en
nuestro país”, indicó Cuevas.
“El
que dos importantes empresas mexicanas hayan decidido dejar de comprar
productos de la empresa Ford, y el que muchas personas compartan y festejen
este hecho, tiene afectaciones marginales para esa empresa y sólo enrarece y
complica el panorama para nosotros mismos”, apuntó.
La
Unión confía en que será pasajera la cancelación de inversiones norteamericanas
pues hay órdenes internacionales como la OMC en donde se pueden pelear las
disposiciones que pretenda fijar Donald Trump con aranceles irracionales a los
productos mexicanos o la renegociación del TLCAN.
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