Chimalhuacan, Estado de México a 20 de Agosto de 2015. Ante la negativa del gobierno federal de cumplir sus compromisos en materia de salud, el día de hoy, 20 de agosto, autoridades del gobierno del Nuevo Chimalhuacán, médicos, enfermeras y padres de familia realizan un mitin en avenida Reforma, en el Distrito Federal, frente al edificio del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Asimismo, se movilizarán en la ciudad de Toluca el próximo lunes 24 de agosto para exigir al Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) que concluya las obras comprometidas en el Hospital General de Chimalhuacán 90 Camas; además del equipamiento y la contratación de personal médico del Hospital Materno Infantil 60 Camas, Vicente Guerrero.
En conferencia de prensa, el presidente municipal, Sergio Díaz Espinoza, denunció que el gobierno federal está afectando a más de 33 mil familias chimalhuacanas al no cumplir con los compromisos hechos hace casi un año relacionados con el equipamiento y dotación de medicamento para 19 consultorios médicos, pago puntual a 32 médicos e igual número de enfermeras; diez de ellos, no han recibido ninguna retribución por su servicio desde hace seis meses.
“A pesar de que no es obligación de los gobiernos municipales cubrir las necesidades de salud de la población; desde hace 15 años en Chimalhuacán hemos construido centros de Desarrollo Comunitario que ofrecen servicios de medicina general, dental y psicológica, entre otros. En los cuales el IMSS se comprometió a construir nuevos consultorios y equiparlos; sin embargo, ya se va a cumplir un año y esto no ha sucedido; por el contrario, dejó sin salario a 10 médicos y enfermeras y más de 54 no reciben su sueldo de manera puntual”.
Ante este panorama, el edil apoyó la iniciativa del personal médico y de las familias chimalhuacanas de movilizarse el día de hoy en el Distrito Federal para denunciar las irregularidades de las autoridades de IMSS Prospera. De no obtener una respuesta satisfactoria, volverán a las calles el próximo martes 25 de agosto.
Con respecto a la injusticia social que padecen los chimalhuacanos en el Hospital 90 camas, el alcalde denunció que una vez más el ISEM mantiene paradas las obras comprometidas para la rehabilitación de las áreas de cunero y quirófanos; además de la ampliación de la sala de urgencias y la construcción del espacio para hemodiálisis y banco de sangre.
“Las obras están a medias lo cual representa un foco de contaminación muy grave para los usuarios; sólo está funcionando un quirófano; aún no entregan 30 camas que supuestamente llegarían antes del 31 de julio, por lo que a los pacientes de urgencias permanecen días enteros sentados en una banca con las heridas expuestas. Esto nos causa indignación y no nos quedaremos con los brazos cruzados, nos manifestaremos para que el ISEM cubra la demanda de salud y las necesidades del pueblo chimalhuacano”.
Por su parte, la presidenta municipal electa, Rosalba Pineda Ramírez, denunció que en el Hospital 90 Camas existe un desvío de recursos, pues para las obras de rehabilitación el ISEM comprometió 105 millones de pesos, mismos que alcanzarían para concluir la primera y segunda etapa de las obras; lo cual no ha sucedido.
“Pasa todo lo contrario, a los pacientes los mandan a laboratorios particulares para estudios que por derecho les deben hacer en este hospital y no permitiremos que se siga afectando la economía de las familias chimalhuacanas ni que se juegue con su salud”, comentó.
Situación similar se vive en el Hospital 60 Camas, el cual fue inaugurado en julio de 2011 y aún opera con plantilla de arranque; es decir, sólo cuenta con el 60 por ciento del personal; por lo que es urgente la contratación de 30 enfermeras y 15 médicos de especialidad (8 pediatras y 7 ginecólogos).
Asimismo, se requiere equipamiento y mantenimiento en todo el nosocomio; ya que en temporada de lluvias, el agua se filtra y daña los aparatos, algunos de ellos tienen un valor de 150 mil pesos y requieren 8 mil para su compostura.
“Pero la respuesta del ISEM fue negativa y de represión porque prefirió destituir de su cargo al director y al administrador del Hospital 60 Camas, el doctor Christian Byron Mera Hernández y el contador público Gerardo Olmedo Flores, respectivamente, a quienes despidieron por manifestar su inconformidad por la falta de personal y las malas condiciones del nosocomio”, comentó la Presidenta electa.
Pese a la falta de personal y equipamiento, el Hospital Materno Infantil ofrece mensualmente más de cuatro mil consultas médicas de ginecología, pediatría y externas; además atiende 480 partos y mantiene un registro de cero muertes maternas; también realiza 400 ultrasonidos y da 150 terapias de psicología. “Con justa razón el área médica está cansada, aún así, su compromiso los mantiene velando por el bienestar de nuestro pueblo, es por ello que seguiremos manifestándonos hasta lograr que tanto la federación como el estado resuelvan nuestras demandas de salud”, concluyeron las autoridades.
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