Tlalnepantla, Méx., 23 de septiembre 2015.-El resolutivo del Congreso Nacional sobre las alianzas con el PAN y otros resolutivos aportados en el pleno representa la voluntad de sus congresistas, sin embargo, también señala que será en casos excepcionales.
El partido atraviesa por una coyuntura de transformación que requiere de la unidad y la convicción de sus militantes para hacerla posible.
Es por ello que lamento la decisión y la forma en que el senador Armando Ríos Piter ha decidido declinar su participación para la renovación de la dirección nacional. Más aún cuando ni siquiera se ha hecho pública la convocatoria.
Más pareciera un simple pretexto para justificar su decisión, expresó esta mañana en entrevista el dirigente estatal Omar Ortega Álvarez.
La forma en la que se ha manifestado en contra de las alianzas más allá de las izquierdas y su anterior decisión de abandonar de la misma forma la búsqueda por la candidatura de Guerrero, deja entrever que el senador desea una contienda a modo, a la segura para él, porque dos declinaciones seguidas sólo hace notar ambigüedad y falta de congruencia de su parte.
Contrario a sus argumentos, su actuar deja entrever una clara doctrina priista, es decir, que un enorme deseo por ser impuesto en la dirección del partido y como eso seguramente no sucederá, Armando decidió bajarse por segunda vez consecutiva de un proceso interno.
¿A quién ha beneficiado con sus decisiones? Al PRD, no. Expresó el también diputado federal Omar Ortega.
Respetamos su decisión, sin embargo no comparto sus motivos, ya que el PRD es proyecto de millones de mexicanos y la reestructuración por la que está pasando, es sin duda un gran reto.
La elección de la dirección nacional será sin duda de gran importancia para el futuro inmediato del PRD, y participarán en ella militantes que están convencidos de que la revolución democrática debe continuar contribuyendo a la transformación del País, concluyó Ortega Álvarez.
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