Texcoco, Méx.- Bastó un minuto y 20 segundos para que el equipo de los Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara acabara con los sueños de varias generaciones de ex jugadores y jugadores de la Universidad Autónoma de Chapingo, ya que en solo ese tiempo el equipo visitante anotó los 16 puntos que a la postre serían suficientes para adjudicarse el campeonato de la ONEFA, en un trepidante partido que a pesar del marcador (16-6), los Toros Salvajes de la UACH tuvieron más oportunidades de lo expresado en el marcador.
Unas 5 mil personas se reunieron en las gradas y alrededores del estadio “Palomo Ruiz Tapia” al interior de esta casa de estudios, donde al filo de las 3 de la tarde dio inicio el esperado encuentro, donde se podían ver personas adultas amantes del futbol americano y que en sus juventudes participaron en el equipo de los Toros Salvajes, muchas veces en marcadores escandalosos de más de 50 puntos en contra de los chapingueros: Sin embargo, para ellos hoy era diferente “hoy era del día de la victoria en la final que llegaba después de 30 años”, pero el destino tenía otros propósitos.
Prácticamente, el primero y segundo cuarto, los equipos se fueron en igualdad de circunstancias, salvo que los Toros Salvajes dejaron ir una gran oportunidad al llegar a la yarda 2 contraria sin poder anotar, y que en la última oportunidad el equipo fallo una jugada por tierra y desechó la opción del gol de campo, al final se supo porque, el pateador de Chapino falló dos goles de campo en el partido.
Pero llegaron los fatídicos últimos 2 minutos de la primera mitad para los chapingueros, ya que ahí se desató el nerviosismo o la impotencia de no poder anotar y dieron comienzo los errores, el equipo de Chapingo perdió el balón y ahí los tecos con un pase anotaron 6 puntos y luego un punto más con el extra. Vino la patada de salida, la recibe el regresador de patada de Chapingo dentro de su zona de anotación sale de la zona ve mucha gente contraria y se regresa a su zona de anotación donde es tacleado por lo que se marca una auto anotación de 2 puntos. Ante ello el equipo de Chapingo patea de salida y en la primera jugada un pase largo de los Tecos y sin marca alguna hace que el receptor anote de forma fácil (7 puntos más con el extra), ya que el equipo local se había desfigurado. Ahí fueron los 16 puntos con los que ganó el equipo visitante.
De ahí, Chapingo logró anotar 6 puntos ya en el último cuarto y quisieron hacer la conversión de 2 puntos, lo que no lograron, después fallaron un gol de campo al recuperar un balón perdido y así lograron que las miles de personas hasta el final del partido apoyaran a su equipo que finalmente sucumbió generando la tristeza de las viejas y nuevas generaciones, todo por un minuto de nerviosismo, impotencia y novatez.
Como un juego especial que era de Campeonato por parte de la Organización Nacional Estudiantil de Futbol Americano (ONEA), había una mesa de honor donde estuvieron sentados: Edgar López Herrera, Director General Académico en representación del Rector, Sergio Barrales Domínguez; María Antonieta Goitia, Directora General de Administración.
Así como en representación del Rector de la Universidad Autónoma de Guadalajara, Antonio Leaño, el licenciado, Jorge Tinoco Flores; Francisco del Real Sánchez, Presidente de la ONEFA; el Presidente Municipal de Texcoco, Nazario Gutiérrez Martínez, así como el Síndico, Edmundo Rosales López y Amado Villaseñor Castro, asesor de la sindicatura municipal y ex estudiante de esta universidad; Jorge Luis Castellón, Tesorero General y egresado de la UACH y finalmente y José de Jesús Méndez Castañeda “El Tarzán”, Presidente de la Fundación, “Toros Salvajes Tradición y Futuro”, donde por cierto de todos ellos el único feliz era el representante de Los Tecos de la UAG.
Cabe destacar que a solicitud del equipo de los Toros Salvajes de Chapingo a la autoridad municipal, el gobierno local otorgó 200 litros de bebida energética, una hielera y tres balones nuevos profesionales expresos para este partido.
Después del encuentro los miles de asistentes reconocieron el esfuerzo de los visitantes y les brindaron una gran ovación y después de ello recibieron el trofeo que los acredita como campeones de la Liga Mayor de la ONEFA y mientras el equipo de Guadalajara daba la vuelta olímpica y festejaban junto con un pequeño contingente llegado desde aquel estado del país, los chapingueros en un círculo recibían el apoyo de sus entrenadores. Aunque la voz de las tribunas señalaba que este partido era su gran oportunidad.
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